En Maristas Cullera apostamos por la formación continua de nuestro profesorado, confiando plenamente en ella como una herramienta vital de crecimiento profesional del que se verá beneficiado directamente el alumnado del centro. Es por ello, que tanto desde el centro a nivel local, como a nivel provincial y, como no, de manera individual, se fomentan y facilitan los momentos y los recursos para desarrollar diferentes acciones formativas.
El colegio cuenta con un Equipo de Formación e Innovación Local que se encarga de toda la labor de gestionar y realizar el seguimiento, así como de evaluar las actividades formativas que se desarrollan anualmente atendiendo a esos tres marcos generales en los que clasificamos dichas formaciones.
Encontramos por ejemplo formación en metodologías activas, obtención de títulos en competencias lingüísticas, especialización en alguno de los aspectos curriculares, diseño de programaciones didácticas, aspectos referentes a la orientación pedagógica, formación en la aplicación de las nuevas tecnologías para el trabajo tanto presencial como no presencial, …
Desde el centro, y ofreciéndose fuera del horario lectivo, contamos con certificación tanto en reconocimiento en el dominio de herramientas Microsoft Office como también en Competencia Lingüística de inglés, esta última integrada en el Plan PIPE (Plan Integral de Plurilingüismo Educativo) del que dispone el centro gracias al acuerdo con la empresa Activa. Estas formaciones son abiertas tanto a alumnos como a familias, evidentemente, y también a personas que no pertenecen a la comunidad educativa del colegio.
Por último, recalcar también la labor conjunta realizada entre el equipo de Formación local y el equipo de Orientación, para ofrecer formación a las familias del centro. A través de nuestra “Escuela de padres” nos proponemos dar respuesta a la demanda de las familias en cuanto a temas de interés referentes al desarrollo personal, físico o educativo de sus hijos e hijas. A lo largo del curso se desarrollan sesiones para atender y fomentar estos momentos de enriquecimiento para las familias, dotándoles así también de herramientas para el desarrollo de la función educativa que, entendemos, debe ir de la mano con la que sus hijos reciben desde el colegio.